Ocho tapices
La exposición de ocho tapices en la Iglesia Vieja de Mont-roig supone un nuevo acercamiento de Joan Miró al pueblo que tanto le inspiró. En este singular espacio patrimonial, la colección de tapices creados conjuntamente con Josep Royo encuentra un marco idóneo para ser contemplada desde la proximidad y el respeto por el lugar.
Tal como señala Rosa Maria Malet, “de todas las técnicas con las que trabajó Miró, la obra textil es la más tardía”. No fue hasta 1970, gracias al conocimiento y la complicidad técnica de Josep Royo, que el artista pudo expresarse con una radicalidad textil comparable a su pintura más libre y matérica. El dominio que Royo tenía de los materiales permitió trasladar al urdimbre y la trama el espíritu de experimentación de Miró, incorporando texturas, objetos y acciones como quemar, insertar o romper el soporte.
El diseño escenográfico concebido para la Iglesia refuerza esta expresividad. La arquitectura del espacio, con sus capillas laterales, establece un diálogo directo con cada pieza expuesta. El elemento escenográfico central, construido en madera pintada y diseñado de forma modular, actúa como catalizador visual: resalta las obras, genera múltiples perspectivas y ofrece lecturas estéticas que evolucionan con el recorrido del visitante.
A diferencia de un muro opaco, esta estructura es vectorial y transparente, lo que permite ver a través de ella y contemplar también los tapices por su parte posterior —una visión poco habitual que revela la complejidad técnica de cada obra. Su carácter modular facilita la reutilización y adaptación a futuras exposiciones: puede panelarse si se requieren superficies planas, y almacenarse fácilmente en el mismo espacio, sin perder funcionalidad ni coherencia con el edificio histórico.
Con este proyecto, Miró regresa simbólicamente a Mont-roig. Y lo hace, como siempre, explorando nuevos lenguajes, encontrando aliados para hacer realidad sus visiones y dejando, una vez más, una huella imborrable en la historia del arte contemporáneo.
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Instituciones impulsoras: Fundació Mas Miró – Ayuntamiento de Mont-roig del Camp
© Fotografías y renders: Ignasi Cristià